Cuenca, acogedora y encantada

  
    Estos son los adjetivos que se vienen a mi cabeza cuando pienso en Cuenca, pero anímate a conocerla porque cuando la visites descubrirás que esta pequeña ciudad alojada entre las hoces de los ríos Júcar y Huécar, que tiene anclado su casco histórico en las paredes rocosas del acantilado, es mucho más, te va a sorprender con toda seguridad, disfrutarás de su vivir apacible. Se hace imprescindible ver...





Valle del Jerte: cerezo en flor



                                                                                  
    En Cáceres, entre la Sierra de Gredos y Plasencia se encuentra el Valle del Río Jerte, afluente del Alagón, paso natural de trashumancia, camino real que todavía hoy se utiliza para el traslado del ganado.             
Este amplio valle que acoge once pequeños pueblos nos regala en cada rincón un verdadero espectáculo, la lluviosa primavera ha hecho que cascadas, ríos, arroyos y pozas nos deleiten con el frenesí de aguas en movimiento y el canto de cientos de aves que  nos hacen mirar al cielo.