Cuenca, acogedora y encantada

  
    Estos son los adjetivos que se vienen a mi cabeza cuando pienso en Cuenca, pero anímate a conocerla porque cuando la visites descubrirás que esta pequeña ciudad alojada entre las hoces de los ríos Júcar y Huécar, que tiene anclado su casco histórico en las paredes rocosas del acantilado, es mucho más, te va a sorprender con toda seguridad, disfrutarás de su vivir apacible. Se hace imprescindible ver...






1. Las Casas Colgadas que asoman sobre la Hoz del Huécar con su estilo gótico, hoy sólo quedan tres y están restauradas aunque conservan algunos elementos originales. Son el signo de identidad de la ciudad.

2. La Catedral de Sta. María y S. Julián, de estilo gótico, se comenzó a construir en el s. XII, en siglos sucesivos se fueron incorporando nuevos elementos arquitectónicos y en la actualidad se continúan con constantes obras que le aportan un aspecto inacabado.


3. La Torre de Mangana, ubicada en la antigua judería y edificada sobre un alcázar árabe es hoy el reloj de Cuenca, aunque en el pasado su función fuera de vigilancia y defensa.


4. La Plaza Mayor, de forma irregular  es el centro de la ciudad antigua , en ella se encuentra el Ayuntamiento, la Catedral y el Convento de las Petras.



5.  El Arco de Bezudo, es una de las puertas de entrada a la ciudad, forma parte de los restos que se conservan del castillo y muralla, se encuentra en la parte alta de Cuenca, una atalaya para contemplar la ciudad en su tranquilo devenir. 


6. La Ciudad Encantada, a unos 30 km.  en el Parque Natural de la Serranía de Cuenca se encuentra un paraje donde predominan las formaciones rocosas calizas que los elementos atmosféricos se han encargado de darles caprichosas formas, mostrándonos animales y objetos de piedra y desproporcionadas dimensiones. En la carretera que nos lleva de Cuenca a la Ciudad Encantada  vas a encontrar un mirador, el Ventano del Diablo,  que te invita a bajar del coche y asomarte a contemplar las panorámicas de la hoz del Júcar y de la Serranía de Cuenca.



7. También en este Parque Natural, encontrarás el Nacimiento del río Cuervo, lo constituyen una serie de cascadas donde el agua brota de un manantial y cae por unas estalactitas recubiertas de musgo. El microclima continental húmedo existente en el lugar, favorece la diversidad floral, siendo de especial atractivo para los amantes de las orquídeas por la variedad de especies existentes.